Badosa muestra su «verdadero yo»: cómo enfrenta la depresión y los «haters»

Paula Badosa no vive su mejor presente adentro de la cancha, pero fuera de la pista ha recorrido un largo camino lleno de problemas. Y que hoy la tiene entre las mejores jugadoras del mundo y valorando el haber podido conseguir objetivos tras sufrir problemas personales, sobre todo con su salud mental. Depresión, ansiedad, críticas y comentarios negativos de los «haters». De todo eso habla Badosa en una entrevista con la WTA para la serie «the real me», «mi verdadero yo».

«Yo era muy muy joven y no estaba preparada para escuchar todo eso», arrancó Badosa sobre los inicios de su carrera, cuando ganó Roland Garros júnior y muchos la catalogaban como la nueva «Maria Sharapova». Pero esa comparación y expectativas le causó problemas. «Me generó mucha presión. Mucha gente viendo mis partidos. Fue muy duro para mí».

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Badosa sufrió emocionalmente y eso se vio en su tenis, ya que tardó varios años en conseguir buenos resultados. «No había madurado lo suficiente para saber cómo controlar mis emociones. Estuve luchando dos o tres años contra eso, fue muy duro», relata la española, que padeció depresión. «Yo solo pensaba en quedarme en casa sola y luchar conmigo misma. Era muy negativa y no encontraba la manera de salir de eso».

Badosa asegura que la decisión de cambiar su equipo de trabajo y empezar a trabajar con un psicólogo la ayudó a salir de ese pozo en el que estabas. «El tenis es un deporte en el que te sientes sola y cuando estás sola algunas veces tomas malas decisiones. Empecé a ser feliz en la pista y fuera de ella», afirma la española. Aunque todavía sigue trabajando para superar las frustraciones. «Cuando pierdes piensas que no eres lo suficientemente buena, es muy fácil decirlo. Llevas toda la vida haciendo tenis, así que te valoras por los resultados. Intento trabajar en eso».

Badosa también se refirió a los «haters», un tema del que ha hablando en otras ocasiones y que le genera muchas molestias. «No puedo entender por qué hay gente que me odia si no me conoce», sostiene la ex número 2 del ranking WTA, que incluso ha llegado a dejar de utilizar sus redes para evitar contacto con esos comentarios negativos. «Era demasiado para mí. No podía dormir, porque pensaba que la gente podía estar en lo cierto, que no era una buena jugadora de tenis».