Novak Djokovic le gana a Tsitsipas uno de los mejores partidos del año y es finalista en Paris

Por Juan Regueiro - 5 de noviembre, 2022
Djokovic
Foto: Twitter Paris ATP

A diferencia de lo ocurrido en el primer partido de semifinales del ATP Masters 1000 de París-Bercy, en el segundo hubo un nivel altísimo. Novak Djokovic y Stefanos Tsitsipas jugaron uno de los mejores partidos del año, con una definición infartante. En un partido que duró más de dos horas, Novak Djokovic se llevó la victoria en tres sets por 6-2, 3-6 y 7-6. Ambos jugadores tuvieron subidas y bajadas en cuanto al nivel y eso hizo que el partido se defina de manera impresionante. Djokovic se enfrentará en la final a Holger Rune, este domingo. 

El primer set parecía ser una muestra de lo que venía sucediendo a lo largo de toda la semana. Djokovic dominó completamente a Tsitsipas, anulando toda chance de poder ponerse adelante en el marcador. Además el serbio estuvo fino desde el fondo de la cancha, sumando solamente un error no forzado en sus estadísticas. Esto daba muestras del enorme nivel que estaba mostrando el exnúmero uno del mundo, que se llevaba el set por 6-2.

Ya en el segundo la historia cambió completamente para Tsitsipas, con un golpe sobre la mesa. Allí Djokovic dejó de estar fino en su juego, sumando 12 fallas ante un Tsitsipas que comenzaba a crecer en cuanto al tenis y en su mentalidad. En ese momento el griego se apoyó en la gente y empezó a pedir aliento. Esto no gustó a Djokovic, que empezó a mirar desafiante a la gente y a su equipo. Cediendo el segundo set, Djokovic se empezó a desmoralizar y la historia se igualaba.

Para el tercer set, el partido parecía más una pelea de boxeo que tenis. Golpe por golpe, Djokovic y Tsitsipas no perdían su servicio. El desgaste físico empezaba a ser una realidad, más por el lado de Djokovic que el de Tsitsipas que seguía recibiendo el apoyo de los parisinos. Nole llegó a tener dos chances de quiebre claves, en el 4-4, pero Tsitsipas lo sacó adelante con muchísima solvencia. El griego volvía a crecer, pero todo se definía en el tie-break que comenzaría palo y palo.

Luego de mantener sus servicios hasta la mitad del tie-break, Tsitsipas llegó al mini quiebre en el séptimo punto y parecía que iba a definir todo a su favor. La lluvia de gritos para el griego llegó en ese momento, pero Djokovic se recuperó de manera espectacular y quebró el saque de Tsitsipas para ponerse adelante y sacar para el partido. Finalmente con un error garrafal por parte del griego, Djokovic dispuso de dos puntos para partido y definió la historia por 7-4 y meterse en la final.

 

Juan Regueiro