Rinderknech, emocionado: «Se lo dedico a mi abuela que falleció hace cinco días»

Por Nico Quércia - 14 de octubre, 2022
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Arthur Rinderknech ganó uno de los partidos más dramáticos del año a Pablo Carreño Busta en Gijón. Y lo celebró de forma muy especial. El francés, 56° del ranking mundial ATP, venció al español en el torneo de su ciudad para avanzar a semifinales salvando nueve match points. Sí, en un final de locos, Rinderknech derrotó a Carreño 18 a 16 en el tie-break decisivo. El español dispuso de nueve bolas de partido, pero no las pudo tomar. Y en su sexto match point, el francés se quedó con la victoria más emotiva de su vida. Por el final. Y por la muerte de su abuela, a quien le dedicó el triunfo.

«Difícil decir algo ahora, el partido fue una locura. Se lo dedico a mi abuela que falleció hace cinco días. Esta victoria es para ella», fue la primera reacción de un Rinderknech muy emocionado tras ganar en Gijón. El francés acabó en el suelo, incrédulo por el desenlace. Y lanzando besos al cielo para su abuela.

Locura: Rinderknech saca a Carreño de Gijón salvando… ¡9 match points!

«El primer set no me sentía bien, estaba luchando. Así que pensé en mi abuela y pude ganar el partido por ella», siguió el galo. El encuentro había sido muy parejo, con ambos tenistas dominando sus juegos de saque. Pero en el tie-break ninguno podía dar el golpe final, entre nervios y drama. Hasta que Rinderknech lo hizo. Aunque sin saber muy bien cómo. «No sé cómo lo hice la verdad. Fue ridículo. Fue duro para Pablo y para mí».

Nueva chance para Rinderknech

Esta es la cuarta semifinal para Rinderknech a nivel ATP y tercera en 2022. Solo pudo ganar una vez, aunque luego perdió la final en Adelaida ante Thanasi Kokkinakis. Y tras superar a Carreño el final más dramático de su carrera, ahora deberá enfrentar a Andy Murray o Sebastian Korda. «Es solo un partido a la vez. Trabajamos duro con mi entrenador en cada partido para tener nuestras chances», dijo el francés. Que entre la emoción y la alegría hasta se puso a pensar en el público que quería el triunfo del gijonés Carreño. «Perdón a todos».

Nico Quércia