La dura imagen que refleja la crisis que atraviesa la Copa Davis

Por Juan Regueiro - 14 de septiembre, 2022
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Foto de Copa Davis

Hace algunos años la Copa Davis comenzó un nuevo formato gracias a la llegada de un grupo inversor liderado por el futbolista del Barcelona, Gerard Pique. Piqué fue uno de los que introdujo el nuevo cronograma de competencia, que deriva en el sistema de grupos y dejó atrás las localías y todo el color que caracterizaba a la Davis históricamente. La empresa Kosmos Tennis, liderada por Piqué, es una de las grandes responsables de la crisis del torneo.

Muchas críticas caían sobre la Copa Davis hace algunos años. Algunos aseguraban que el formato ya era viejo, que los mejores jugadores del mundo no la querían jugar y hasta que la llegada de Piqué cambiaría la historia. Sin embargo pasó todo lo contrario a lo que se esperaba. Salvo en esta edición, que Carlitos Alcaraz está presente en el equipo español, pocos son los jugadores top que aceptaron representar a sus países.

El caso más emblemático es el de Novak Djokovic. El serbio prefirió asistir al casamiento de su hermano, en Montenegro, que a representar a su bandera en la Copa Davis. Nole puso por delante su familia, algo totalmente entendible y válido, pero que en otras situaciones no hubiese ocurrido. Además este martes (día totalmente extraño y ajeno en el formato anterior), se vivió una insólita imagen que dio la vuelta al mundo.

En el duelo que enfrentaba al belga Zizou Bergs y el australiano Jason Kubler. El partido se dio en Hamburgo, donde todo el mundo espera la presencia del equipo local. Sin embargo lo que todos miraron fue la tribuna. En el estadio alemán había poco más de 200 espectadores, un número completamente insólito para una fase final de Copa Davis. Además se informa que la entrada más ‘económica’ rondaba los 65 euros. ¿La Copa Davis perdió la magia? ¿Habrá cambios ante la crisis que vive el histórico torneo?

Juan Regueiro