Boris Becker encuentra un nuevo trabajo en prisión… como instructor de yoga

Boris Becker cumple una sentencia a dos años y medio de prisión por fraude en su declaración de bancarrota. Y parece haber encontrado un nuevo oficio. El alemán, uno de los grandes tenistas de la historia, fue declarado culpable en un juicio en su contra por movilizar cientos de miles de dólares tras declararse en bancarrota, un fraude que lo llevó a cumplir una pena efectiva en prisión. Y allí, en medio de uno de los momentos más oscuros de su vida, halló una manera de salir adelante: es instructor de yoga.

«Como deportista conoce demasiado bien los altibajos de las victorias y las derrotas. Está compartiendo su experiencia de vida con sus compañeros de prisión», dijo una fuente cercana al ex tenista de 54 años según Bild. El medio germano reporta que Becker dejó el alcohol y bajó de peso, un cambio en su vida tras tocar fondo.

A la cárcel: Boris Becker es condenado por fraude en su bancarrota

Las razones para la sentencia a Boris Becker

Según la jueza Deborah Taylor, Becker no mostró arrepentimiento o aceptación de su culpabilidad tras haber sufrido una acusación por evasión impositiva en Alemania en 2002. «No escuchaste la advertencia recibida por una sentencia en suspenso y eso es un agravante», determinó la jueza. Además, afirmó que el extenista alemán no mostró «humildad» durante el proceso.

A Becker lo había declarado culpable de sustracción de bienes y ocultación de patrimonio y de una deuda ligada a un préstamo de 3,5 millones de euros de un banco privado tras declararse en bancarrota. Si bien fue exculpado en 20 cargos, fue sentenciado a dos años y medio de prisión por el fraude.