Vicky Jiménez hace más historia para Andorra: «Estoy orgullosa de representar a mi país»
Victoria Jiménez Kasintseva hace historia para el tenis de Andorra a cada paso que da y lo volvió a hacer este miércoles en el WTA 250 de Seúl. La zurda de 17 años derrotó a la canadiense Rebecca Marino, 81° del ranking mundial femenino, para avanzar a cuartos de final en el torneo que se disputa en Corea del Sur. Vicky ya era la primera andorrana ganadora de un partido en un torneo WTA esta semana. Y ahora se transformó en la primera jugadora de su país en alcanzar cuartos de final. Algo que se irá repitiendo a medida que crezca. Y es un motivo de «orgullo» para ella.
«Estoy muy, muy orgullosa de representar a mi país», dijo Jiménez Kasintseva a la WTA tras su triunfo en Seúl. La zurda, 186° del mundo, estaría accediendo a su mejor ranking histórico (153°), aunque va por más. Y en cuartos de final enfrentará a Jelena Ostapenko o Anastasia Gasanova. Pero su camino está pensado hacia el futuro promisorio. Y también con una mirada al pasado esforzado, ya que en su Andorra natal no había infraestructura para desarrollarse en el tenis, por lo que debió mudarse.
Jiménez Kasintseva hace historia en Seúl: primera tenista de Andorra que gana en un WTA
«Viví con mi padre en Barcelona mientras mi madre estaba en Andorra con mi hermano, y eso fue muy duro para mí. Pero, sinceramente, me hizo más fuerte», asegura Jiménez, quien se inspira en casos como los de Ons Jabeur (Túnez) y Alex Eala (Filipinas), jugadoras que también debieron hacer traslados a grandes distancias para poder triunfar en el tenis. «Tengo toda una carrera por delante y quiero disfrutar el proceso, y el destino me llevará por el camino».
Vicky se hizo conocida en el mundo del tenis cuando se consagró campeona del Abierto de Australia júnior con 14 años en 2020. «Cuando lo pienso, es increíble lo que hice en el Abierto de Australia», recuerda la zurda. «Solo tenía 14 años, era una niña pequeña y era mi primer Grand Slam. Es increíble lo poderosa que era mi mente y lo fuerte que era para pensar que peleando y dando lo mejor de mí podía ganar el título».