Vea cuáles son los rituales que los mejores tenistas siguen antes de jugar

El tenis es un deporte de muchas supersticiones y con tenistas un más supersticiosos: las líneas que no se pisan, las toallas blancas, las botellas de Nadal o los grips de Gasquet, son sólo algunos ejemplos. Sin embargo, el ATP Tour preguntó a algunos de los mejores jugadores del mundo cuáles son los rituales que siempre deben hacer antes de un juego, y estos confesaron todo.

John Isner: “Antes de servir golpeo la pelota entre mis piernas, pero es una de esas cosas en las que no pienso en absoluto. No es consciente, sino una cuestión de ritmo”.

Denis Shapovalov: “Paso la pelota entre mis piernas antes de servir. Le da a mi cuerpo una sensación de rutina y calma”.

Novak Djokovic: “Tengo algunos. Siempre medito un poco por mi cuenta y tengo muchas técnicas de respiración que me gusta hacer todo el tiempo. Eso me deja en la ‘zona’, para así analizar a mis oponentes y mi propio juego”.

Stefanos Tsitsipas: “Siempre uso el mismo gel de ducha, champú y acondicionador”.

David Goffin: “Si las cosas van bien en un determinado torneo, siempre uso la misma ducha”.

Grigor Dimitrov: “Uso la misma ducha. Y eso es todo”.

Fabio Fognini: “Siempre uso la misma ducha. Si hay alguien ahí, esperaré”.

Roberto Bautista Agut: “Me gusta ducharme siempre en la misma ducha y siempre uso el mismo tipo de ropa interior. Nada loco”.

Nick Kyrgios: “Lo único que hago es cambiarme los zapatos en la cancha. Siempre voy con un par de Jordanas y me cambio en la cancha por mis tenis”.

Alexander Zverev: “Beso a mis perros. Antes de cada encuentro beso a Junior y a Lovik y luego voy a la cancha”.

Jannik Sinner: “Cuando sirvo, golpeo la pelota cinco veces antes del primer servicio y cuatro veces antes del segundo”.

Daniil Medvedev: “Me gusta calentar para un encuentro tres horas y media antes. Pero no es algo que me obsesiona. Si por casualidad los transportes se retrasan, no entraré en pánico”.

Stan Wawrinka: “Tengo algunas rutinas. Escucho música, hablo con mi entrenador. Son más rutinas que supersticiones”.

Andrey Rublev: “Cada torneo es diferente. Cuando gané en Moscú, fui al mismo restaurante todos los días y pedí exactamente la misma comida. En Doha almorzamos toda la semana en la misma mesa y en Adelaida sin importar la hora íbamos al lobby del hotel a tomar té. Varía…”.

Karen Khachanov. “¡No lo diré! Quiero que sea un secreto”.