Rune salva 4 match points y vence a Van de Zandschulp en una final dramática en Múnich

Por Nico Quércia - 23 de abril, 2023
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Foto de ATP

Holger Rune conquistó su segundo título en el ATP 250 de Múnich tras vencer a Botic Van de Zandschulp en una definición dramática. El tenista danés se recuperó de molestias físicas y salvó cuatro match points para imponerse en una batalla de casi tres horas contra el neerlandés, en lo que fue la revancha de la final que ambos jugaron el año pasado en Múnich. Rune parecía al borde del retiro en varias ocasiones, pero encontró una vida más. O cuatro. Y cuando llegó la hora de la definición, demostró su jerarquía para privar a Van de Zandschulp de su primer título ATP. Al final, el danés ganó por 6-4, 1-6 y 7-6(3) en una definición increíble.

El año pasado, ambos tenistas jugaron la final en Múnich y fue el neerlandés el que debió abandonar por lesión. Un año después, Botic volvió a una final ATP, pero contra un Rune muy mejorado, ya metido en el Top 10 como uno de los mejores jugadores del planeta. El danés lo demostró en el primer set. Pero si en la final de Montecarlo ante Andrey Rublev se quedó sin combustible, aquí directamente la carrocería pagó el precio. Rune pidió asistencia médica por dolores en su hombro y en la espalda. Y empezó a tener dificultades para moverse. Pero no se retiró y decidió llegar al final del partido.

Pese a las molestias físicas, Rune siguió peleando con su corazón de campeón. Van de Zandschulp apretó el acelerador. Pero tuvo dudas al final, ya que perdió dos match points y sufrió un quiebre cuando servía para partido. El danés se creció y cuando tuvo otra chance para recuperar el quiebre, sufrió otra molestia física. Se dobló el tobillo derecho y debió recibir nueva atención médica. Pero increíblemente, volvió a jugar y quebró otra vez.

Sin embargo, al juego siguiente, Van de Zandschulp recuperó el quiebre y sacó por tercera vez para llevarse el título. El neerlandés tuvo otros dos match points, pero Rune los salvó, el cuarto de ellos con maestría en un punto memorable. Y llevó la definición del partido al tie-break gracias a una doble falta de Botic. En el desempate, Rune demostró la diferencia de jerarquía entre uno y otro jugador. Jugó mejor en el momento que más importaba y logró un triunfo memorable, de los más increíbles de su carrera. Y gana su cuarto título ATP, el primero de la temporada y el segundo en Múnich.

Nico Quércia