Rafa Nadal confiesa que su motivación dejó de ser complacer a los demás
El número uno de mundo, Rafael Nadal, comenta como mucha satisfacción la victoria que tuvo sobre el ruso Daniil Medvedev en la final del Abierto de Estados Unidos, partido que le causó mucha emoción y le hizo obtener su título 19 de Grand Slam, el más reciente. «Hay que entender el momento. Las últimas tres horas de partido fueron especialmente duras para mí, porque tenía el partido prácticamente ganado y vi cómo se fue complicando muchísimo hasta tal punto que estuve en una situación realmente crítica para perder la final”.
“Era una oportunidad para mí, igual que para él, pero hasta el tercer set, la tenía encaminada. Fueron muchas horas sufriendo, resistiendo, y tanto el físico como la cabeza estuvieron expuestos a un estrés muy grande, y después de todo llegó ese momento de debilidad», continuó el jugador español en declaraciones que recuerda el portal de la ATP.
De igual manera, aclara cuáles son sus verdaderas motivaciones en la cancha: «Mi motivación nunca ha sido lo que puedan decir los otros de mí o demostrar que puedo hacer cosas que los demás no. Es un concepto del que intento huir en mi vida en general. La ambición y la motivación tienen que ser personales, no por motivos externos”.
“No me gusta ese espíritu y toda mi vida he intentado no trabajar desde ese punto de vista, porque intenta conseguir cosas desde el rencor. Al contrario, intento trabajar emociones positivas”, confiesa el mejor tenista del mundo en la actualidad del circuito masculino.