¿Por qué Roland Garros no usa el Ojo de Halcón?

Por Nico Quércia - 24 de mayo, 2023
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A días del comienzo de Roland Garros 2023, un tema siempre polémico vuelve a la escena: ¿por qué en el Abierto de Francia no se usa el Ojo de Halcón? La tecnología de revisión para determinar si una bola entró o no en la cancha es cada vez más utilizada en el tenis mundial. De hecho, la ATP ya anunció que para 2025 todos los torneos del circuito masculino de tenis deberán usar algún sistema de tecnología. Y los tres Grand Slams (US Open, Abierto de Australia, Wimbledon) sobre canchas duras o césped ya usan el sistema. Sin embargo, en Roland Garros todavía se resisten al cambio. ¿Por qué?

En primera medida, existe una idea de que la precisión de la tecnología de Ojo de Halcón en torneos de arcilla es más cuestionable que en canchas duras o césped. Al ser una superficie «viva», con polvo que se levanta y se mueve constantemente, las imágenes no serían tan confiables. Sin embargo, una de las tres empresas principales que se encargan de la tecnología en el tenis, FoxTenn, asegura que el sistema «muestra una calibración constante y en tiempo real y atrapa todo lo que sucede en la pista», según confirmó la empresa a BBC.

¡Le robaron! La reacción de Andy Murray por un polémico fallo en Roma

Ya varios torneos en arcilla como el Madrid Open usan esta tecnología. Aunque otros como Roma se resisten, motivando polémicas como la de Andy Murray con Mohamed Lahyani. El juez sueco vio buena una bola que perjudicaba a Murray y que la tecnología en la transmisión televisiva mostró como mala, lo que enojó a Andy tras perder el encuentro. En Roland Garros, finalmente, hay dos razones que priman para no usar la tecnología: el factor humano y la tradición.

Los Grand Slams son tradicionalistas por antonomasia y se resisten a hacer grandes modificaciones pues, resultados a la vista, lo que hacen funciona. Pero además de la tradición, en el Abierto de Francia valoran el tener el control sobre la toma de decisiones. Y no dejar un sistema «robotizado» en el que los jueces sean meros espectadores, como dijo Remy Azemar, cabeza del equipo arbitral en Roland Garros. Sin embargo, el torneo admite que la mirada podría cambiar en el futuro. «Si el 99% de los torneos se juegan sin jueces de línea, estaremos arrinconados».

Nico Quércia