Pierre Bacchi: juez de silla que dio un vuelco a su vida

Pierre Bacchi es un juez de silla francés que se ha vuelto referencia en el circuito femenino. En la actualidad, Bacchi posee la insignia de oro, es decir, se encuentra en la posición más alta entre las posibles para los árbitros de tenis. El juez trabajó duro para llegar allí, pero su vida no estuvo siempre relacionada con el tenis. Antes de llegar allí, estuvo en el mundo de la gastronomía. Este juez se lo cuenta todo a la página web de la WTA.

El juez francés relató en la entrevista que dirigió un restaurante hasta que decidió entrar al mundo del tenis. Resulta que se trataba de una tradición familiar que pasa de generación en generación. Sin embargo, para Bacchi no duró demasiado, el trabajo se volvió muy “exigente y era agotador”.

Toco cambió, entonces, cuando el francés cumplió 35 años, que fue el momento en el que empezó a explorar otras áreas. “Cuando cumplí los 35 años me puse a buscar algo diferente, algo que me sirviera para disfrutar de la vida desde ya mismo. Yo solía jugar tenis pero no era muy bueno, solo era un fanático, aunque no realmente. Nunca seguí muy de cerca de ningún jugador, simplemente me gustaba el juego. Hasta que un día, hablando con Christian Bimes (ex presidente de la FFT), me preguntó por qué no me animaba a arbitrar, que estaban buscando personal. Me dio un contacto y lo dejó en mis manos”, dijo el juez de silla, según recoge Punto de Break.

Pierre Bacchi también habló sobre su inicio y experiencia como juez. En 2016, el juez recibió su insignia de oro y dos años después quedó en el equipo titular de árbitros de la WTA. “El primer año fue un período de adaptación, nunca antes había trabajado con este equipo, pero me sentí muy aceptado por todos, era como si llevara con ellos toda la vida. Nos ayudamos mucho mutuamente, es algo necesario, si no eres paciente al principio entonces no funcionará. Obtener la insignia de oro puede ayudarte a tomar las decisiones correctas y saber qué debes hacer para ser un buen árbitro”, dijo Bacchi, el juez de silla.