Diego Schwartzman vuelve a ganar 137 días después y se mete en segunda ronda del Abierto de Australia
Toda pesadilla tiene su final y la de Diego Schwartzman terminó este martes, después de una larguísima racha de derrotas. Bajo un sofocante calor, que llegó a rozar los 40 grados de sensación térmica, el tenista argentino superó una dificilísima prueba ante el ucraniano Oleksii Krutykh, proveniente de la clasificación. Superando el parate y la lesión que sufrió hace algunos días en Adelaida, ‘El Peque’ dio un gran paso adelante en su tenis.
Un comienzo de partido que invitaba a soñar. Consiguiendo rápidamente el primer quiebre del partido y dominando con un muy buen juego durante todo el primer set, Schwartzman se mostraba muy entero físicamente y sobre todo con buenos tiros para llevarse la primera manga. Ya en el segundo el argentino seguía con la misma dinámica, pero se encontraba con un Krutykh que bajaba la cantidad de errores no forzados y que lo llevó a un tie-break. Pero Schwartzman se ponía adelante rápido, y con un 5-0 en el desempate, encaminaba todo para ponerse dos sets arriba.
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Sin embargo aparecieron los fantasmas para Diego Schwartzman. El argentino se dejó dominar por el ucraniano y pese a tener tres bolas para set, las desperdició todas. Por su parte Krutykh aprovechó su única chance e igualaba un partido, que parecía podía perder rápidamente. La cara de Schwartzman delataba lo que pasaba por su cabeza: frustración y malos recuerdos que podían dejarlo con las manos vacías y despedirse en las primeras de cambio en Australia.
Ya en el tercer set Schwartzman volvió a ser el mismo pero tuvo un problema: el calor. Cuando estaba 5-3 a favor, el juez suspendió el partido y el argentino estalló de bronca. Casi tres horas después volvió para cerrarlo con su servicio y ponerse dos sets a uno arriba. En el cuarto set el argentino jugó su mejor tenis y pudo cerrar una victoria por 6-4, 6-7, 6-3 y 7-6 que vale mucho desde lo emocional: 137 días de sequía para El Peque, que ahora se enfrentará al ganador del partido entre J.J Wolff y Jordan Thompson.